Por la noche

Por la noche afloran los sentimientos más puros. Es allí, cuando la soledad nos acecha, cuando estamos tan frágiles que un simple abrazo puede partirnos en miles de pedazos. Es allí donde ya nada nos avergüenza, donde salen a flote esas lágrimas que van a perderse como tantas otras. Por la noche es cuando más te extraño, cuando más falta me hacen tus caricias, tus palabras. Por la noche este te extraño me hace daño, me haces daño. Por la noche es cuando te encuentro en mis sueños, sonriendo, tan lindo como la primera vez que te vi. Por la noche recuerdo nuestro primer beso y el último también. Por la noche me reclamo constantemente porque nunca te dije cuánto me molestaba no saber que sentías por mi, ni cuánto en realidad te amaba, y te amo. Por las noches en el fondo de aquella copa, solo queda lamentarme como moría lo nuestro y no hacíamos nada para detenerlo. Por la noche resignada sólo busco encontrarte en alguna calle solitaria, allí donde nadie nos interrumpa, ni siquiera el tiempo o la distancia. Alguna calle que en la que su sin fin de pasajeros ignorándonos nos dejen ser felices por 5 segundos. Por la noche solo deseo estar rendida en tus brazos, tenerte a mi lado y verte sonreír con la sonrisa más sincera de felicidad, mientras un te amo se escapa de entre esos labios que me vuelven loca. Por la noche, despierto con el ruido de la tormenta y sola me encuentro en la tiniebla volviendo a soñarte.

Soledad

Otra noche de soledad
El tiempo pasó pero seguís en mi corazón
De pensarte no puedo dejar.
Y llorar cada vez que recuerdo como nuestra historia se fue como la arena entre mis dedos.
Y reír cínicamente al pensarte a vos en otros brazos.
Cada grano que escapa es un beso que no te di,
Cada lagrima que escapa es un te amo que no dije.
Otra noche de soledad y vos seguís sin estar,
¿Alguna vez estuviste?
Solo te recuerdo en mis sueños,
Tu cara se refleja en las lagrimas que caen.
Tus ojos del color del café siguen apareciendo para atormentarme,
Siguen allí para recordarme la ventana a tu alma que creí descubrir.
Pero luego despierto entre sábanas y tú no estás ahí.
Despierto en la madrugada deseando tenerte a mi lado, vuelvo a caer.
Presa de tus palabras,
Presa de tus miradas,
Presa de aquel maldito amor que llego para quedarse, no como vos, que huiste sin al menos despedirme.

Cada día

Cada vez que veo algún objeto que fugazmente se cruza en mi camino o cruzo por casualidad mientras en realidad busco otra cosa, no puedo evitar viajar al momento donde fue protagonista, esa entrada al concierto donde cante hasta quedar difonica, ese libro que leí bajo la sombra de aquel árbol un verano ya perdido en el pasado, aquella remera que usé cuando nos dimos nuestro primer beso y aquella con la que lloré lamentando haberte perdido.

A veces me pregunto si vos me recordarás por algo, si un pedazo de mí quedó en algún objeto que te llevaste contigo. Si al ver ese cursi oso de peluche te reís recordando cómo nos conocimos, o si cuando abrís tu billetera ,si es que aún lo seguís teniendo, ves ese papel donde escribí ese poema que vos me inspiraste, si cuando pasas por el río, recordas los atardeceres que clandestinamente vimos juntos. Suelo preguntármelo acompañado de lágrimas y una última pregunta, ¿te olvídaste de mi? Si no es así no entiendo que nos paso. Pero si esto es verdad, me gustaría saber cómo, porque yo no puedo, o tal vez no quiero. Cada día se va haciendo más dificil, cada día la distancia crece más y más. Cada día trato de olvidarte pero te recuerdo aun más. Así paso mis días diciéndome a mi misma que esto terminó y que es mejor olvidar, dejar pasar el agua y no tirarme a flotar a la deriva