lunes, 20 de noviembre de 2017

Tormenta fugaz

Nuestros cuerpos se van a fundir creando uno solo
Mi corazón no deja de latir junto al tuyo

El calor de tu cuerpo junto con el mío
Llenan el vacío que nada más lo hará 

Cada encuentro clandestino donde nuestras bocas fugaces se saborean

Dos amantes que carecen de amor
O tal vez desbordan de él 

Dos amantes que se encuentran en la distancia, que se encuentran en la nebulosa perdidos entre lo que fue, es o será

Dos amantes que se buscan a ellos mismos en las luces del otro
Y se pierden en sus sonrisas, en sus besos, en sus cuerpos

Embarcaciones luchando contra la tormenta
Los sentimientos afloran pero ellos se niegan
Solo quieren disfrutarse salvajemente
Sin nada que temer

Pero la tormenta recién comienza


domingo, 5 de noviembre de 2017

Lagrimas de aire

Lagrimas, el agua salada que limpia el alma, que lava el corazón cuando lo malo ya nos sobre pasa, cuando ya no hay escapatoria ellas se escapan y nos hacen reconocer que algo está pasando. ¿De alegría o de tristeza? ¿Por qué no ambas? Tal vez la primera no sólo nos libere de las lagrimas si no que también nos llene el corazón de alegría y euforia. Las segundas se van sin dejar nada más que vacío, ese vacío que parece que nunca nada lo llenara, que ya nada va a ser lo mismo a partir del momento en el que sentiste ese crack en el pecho. 
Heridas que tardan en cerrarse si es que en algún momento lo hacen. Pero algo que si dejan es un aprendizaje aunque tenga que pasar varías gotas por mi, sin ningún paraje.
Sin ningún destino alguno las lágrimas salen y llevan con ellas miles de recuerdos, miles de momentos. 

Gotas que se evaporan al llegar a la barbilla, gotas que se transforman en aire bendito. Aire para vivir, aire para creer, aire para esperar, aire para llorar, aire de paz.







Este en especial tiene un destinatario, es para una persona muy especial en mi vida. Te quiero